Fecha a recordar. Noche a recordar.
Probabilidades de resaca al día siguiente: infinitas.
Dolor de cabeza al día siguiente: muchas más.
A lo que vamos, HOY. Llevamos tiempo esperando este día. Más bien esta noche, y ahora que ha llegado estoy segura de que se va pasar volando... Pero que aun así, sé que va ser tremenda la que vamos a montar. (Sí, lo sé, mi sexto sentido me dice que va ser genial)
Y es que esta noche es de locura, de fiesta, de alegría, de darlo todo. Desfasar al máximo. Beber sin preocuparse por nada ni nadie. Ser feliz aun teniendo un millón de problemas en la mente. Sacarlos todos fuera, olvidarlos por una horas. Bailar, soñar despierta! Seguir bebiendo, hasta que no pueda más el estómago. Bailar hasta que creas que eres el rey de la pista. Ser feliz. Y no dejar que pare la fiesta.
Y qué más da si al día siguiente todo da vueltas? Qué más da si la cama parece que se mueve? Qué más da si tienes borrones en la memoria? No importa, eso es lo que nos demostrará que la noche de hoy ha sido una de las mejores.
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